martes, 1 de febrero de 2011

ANTES DE LA ESQUINA




En el patio éramos nómadas y sedentarios. La eskina era sedentaria, por supuesto nosotros habíamos sido sedentarios desde nuestros orígenes, pero no siempre habíamos estado en la eskina. Hace tiempo, mucho, nos solíamos reunir en una de las canastas de baloncesto. Allí jugábamos a marineros, porque la canasta, para sujetarse, tenía un cuadrado en el que nos sentábamos, y hacíamos que el poste que sujetaba la canasta era el mástil y la canasta y eso, la vela.
Ese lugar era un poco problemático porque nos daban continuamente con las pelotas de baloncesto.
Después de estar en la canasta (bueno, no me acuerdo si fue antes o después) fuimos a un pequeño patio que había justo al salir al recreo (en el mapa sale más grande de lo que es), en ese patio no había nadie porque la gente se lo tomaba más como un pasillo para ir al abierto y despejado recreo. Pero después de bastante tiempo jugando allí nos echaron la bronca y nos dijeron no podíamos ir más lejos de la tubería.
Y allí, en el límite de lo permitido, estaba la esquina. Nos la habían dejado por compasión, y por plastas. Después de echarnos de el patio y la canasta, supongo que estarían hartos ya de nosotros. De todas formas Moisés, el profe de música que tenía el aula al lado de la esquina, nos llamaba la atención cuando se quedaban alumnos castigados durante el recreo, pero nosotros llamábamos a una profesora, y ésta le decía a Moisés que se aguantase, aunque de una manera más sutil. Porque a nosotros nos dijeron que no se pasa de la tubería y no pasamos, que no nos quiten lo bailao u_u*
Antes jugábamos la orca en un muro enano que nos llegaba por un poco más de los tobillos, y era más divertido porque teníamos que aguantar el equilibrio, pero ese murito estaba antes de la tubería. L
Bueno, aparte de ésos seguro que hay otros sitios que se me escapan (si alguien los recuerda, que lo ponga en ‘comentarios’) así que si que éramos un poco sedentarios, hasta que encontramos la eskina. Entonces ya nos instalamos definitivamente allí, y allí continuamos por años, y ni el profe de música no rechistaba. Nunca habríamos sobrevivido en un patio sin rincones escondidos cómo la esquina, no podíamos ser sedentarios y estar toda la hora del recreo vagabundeando de un sitio del patio a otro, simplemente no sabíamos estar sin un sitio en el que estar. No sé explicarme, que cuando jugábamos a Código Lyoko por ejemplo, si se metía gente por medio nos fastidiaba la fantasía. ¿Lo entendéis? Sólo evito que penséis que éramos marginados o algo.. En Madrid, ya no quedan patios de esos en los institutos. Cómo echo de menos Galicia, aquí el patio es una pista de fútbol con las gradas, allí había 3 niveles de patio. Pista de fútbol, baloncesto, patio cubierto, otro patio cubierto, gradas graaaandes, eskina….
¡Ole por Galicia! 

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
©Suzanne Woolcott sw3740 Tema diseñado por: compartidisimo